Se marchita la industria de la floricultura

En todo el mundo, debieron tirar a la basura toneladas de flores.
sábado, 4 de abril de 2020 · 13:53

Mientras nos aislamos y dejamos tranquila a la ciudad, la naturaleza sigue su ciclo. Se ven más flores, el cielo más celeste, volvieron las abejas a los jardines y los animales salvajes se aventuraron en algunos sitios a pisar el asfalto.

Sin embargo la falta de actividad en eventos, casamientos y (aunque duela decirlo) que estén cerrados los cementerios, han motivado que, en muchos lugares del mundo, hayan tenido que tirar a la basura toneladas de flores.

En la provincia de Mendoza, existen aproximadamente 100 productores de flores de corte y 150 de viveros productores y de venta al público. A la producción florícola y al consumo de flores y plantas se suman los que se dedican al paisajismo, jardinería, diseño de jardines y afines, un universo de más de 30000 puestos de trabajo en Argentina.

Allí se estima una pérdida promedio de mil paquetes de flores por productor. "Se está tirando la producción, y en algunos casos dependiendo de la especie floral se ha podido podar para tratar de obtener una segunda floración. Muchos floricultores analizan la reconversión de sus cultivos en plantaciones de hortalizas de invierno", cuenta ingeniera agrónoma Laura D' Agostino.

La mayoría la mano de obra proviene de los sectores más vulnerables de la sociedad, por este motivo el sector de la producción de flores pide ser incluído en las medidas económicas para ser considerado actividad esencial.

Por su parte, en Holanda los floricultores se ven obligados a destruir millones de flores cada día. Cantidad de tulipanes, rosas, crisantemos y otras plantas se alinean en el mayor mercado de flores del mundo, obligado a deshacerse por no poder venderlos."La única solución es destruirlos",  manifestó Michel van Schie, portavoz de una de las cooperativas de flores más grande del país.

"Está todo parado, sin producir y sin trabajar. Todo esto da un pronóstico de catástrofe para toda la cadena productiva y comercial", advierten desde la Asociación Argentina de Floricultores y Viveristas.

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